domingo, 28 de abril de 2013

Deseos Perdidos






Sueños/Deseos Perdidos

Cabalgué con mi bolígrafo
y juntos galopamos
sobre las playas del alfabeto.

Aquellas playas…de amor,
dibujadas sobre las arenas
de la mar de los sueños.

Aquel amor…
dispersado en las arenas…
entre las rocas aladas
y la fragante espuma
del dolor que flota entre las olas.

En medio de la mar
perdida nadando
siempre en el mismo lugar.

Yendo y volviendo…
yendo y volviendo
parada en esa oscura playa.

Al final, el sol me ilumina
y nado saliendo de la oscuridad,
ya sin miedo…

En aquel instante,
enfrentadas las olas
aparece el mensajero del amor
que trae con el alba,
un rayo de luz.

Mi camino se ilumina
y de nuevo nado
hacia la tranquilidad
en busca de sueños perdidos
que esconden mis deseos.

Y así renazcan los días
con el amanecer de la esperanza
abandonando del dolor, sus trampas.




                          Ranim Solayman 

martes, 23 de abril de 2013

Filosofía Islámica Medieval, Ibn-Jaldún: el fundador de la sociología.


El filosofo musulmán de la Edad Media: (Ibn-Jaldún)
شرح و تفسير مقدمة الفيلسوف المسلم المخضرم ابن خلدون



Al principio de la Edad Media, los historiadores musulmanes escribían historias universales que abarcaban desde la creación del universo hasta la historia del profeta Mohamad.
Pero a partir de la segunda mitad del s. X observamos un cambio importante en la historiografía gracias a la razón griega, que había entrado de lleno en esta área.
A partir de entonces, la historia tenía que referirse a la situación del hombre en la sociedad.
En el s. XIII apareció una de las obras más grandes y famosas de esta ciencia; así como,  uno de los más importantes teóricos de la historia de la humanidad, el norteafricano, de origen hispano-árabe, Ibn Jaldún.
Cabe mencionar que el nombre de un árabe medieval, por su  forma, es una especie de biografía resumida. En él se incluye tanto los nombres del padre, del abuelo y del tatarabuelo, como el nombre de los lugares donde la familia se había asentado anteriormente.
En el caso de nuestro autor, procede de su antepasado más lejano, Ibn Jaldún.  
Entonces su nombre completo es
 عبد الرحمن, بن محمد, بن جابر, بن محمد, بن ابراهيم, بن عبد الرحمن, الحضرمي, الاشبيلي
En cuanto al topónimo mencionado en su nombre se pueden señalar dos aspectos:
En primer lugar, الحضرمي – “al Hadrami” de “Hadramwt”, en el sur de la Península Arábiga.
Esto indica su ascendencia árabe meridional.

En segundo lugar, الاشبيلي “Al Isbili”, significa el sevillano. Su familia era dueña de la Hacienda de Doña María (en la actualidad dos Hermanas en Sevilla), la cual, y antes de la toma de Sevilla por Fernando III de Castilla en 1248, cruzó el estrecho y se estableció en Ceuta. Pero, finalmente, regresó a Túnez, donde había nacido Ibn Jaldún en el 1 de ramadán
del año (del calendario musulmán) 732 h (7 de mayo de 1332, según el calendario gregoriano).

Falleció a los 78 años, en ramadán también del año 808h (19 de marzo de 1406).
Ibn Jaldún fue un historiador, sociólogo, filósofo, economista, geógrafo, demógrafo y estadista musulmán. Por ello es considerado como el padre de la sociología y uno de los fundadores de la moderna historiografía, filosofía de la historia, economía, demografía y de las ciencias sociales en general.
Es fundamentalmente conocido por su obra Muqadima o Prolegómenos a su vasta historia de todo el Oriente Medio, el norte de África y el al-Ándalus, que constituye un temprano ensayo de filosofía, historia y sociología.

  
El desarrollo profesional, científico y político de Ibn Jaldún:

Etapa/ fase 1:

Quiero recordar, en primer lugar, que la enseñanza de su época estaba basada fundamentalmente en el aprendizaje del Corán, del hadith, de la lengua árabe y, posteriormente, Ibn-jaldún añadió estudios de filosofía e historiografía.
En segundo lugar, Túnez en aquella época fue un centro cultural que atraía a muchos sabios y maestros.
Esto explica el haber recibido durante su infancia una gran enseñanza a manos de grandes maestros, bajo la dirección de su propio padre. Estos estudios y conocimientos que habían sido adquiridos en esa primera etapa de su vida, fueron parte de su formación intelectual y parecen haber influido poderosamente en la estructura de su pensamiento científico.
Entre los maestros de Ibn-Jaldún durante su infancia y adolescencia, se puede destacar a:

1.      Al-hadrami: El maestro de lengua árabe y estudios del islam “Corán, Hadith y Fikh”.
2.      Al-ibili: El maestro de filosofía. Y otros más.
A los 17 años fallecen sus padres por la epidemia de Peste Negra que afectó a Túnez en 1348. Este terrible acontecimiento interrumpe violentamente esta primera etapa de su formación, aunque no detuvo en modo alguno su carrera como político y hombre de letras. Por esta razón tuvo que abandonar el país.

Etapa/fase 2: desde 1348 hasta 1375:

Su vida transcurre muy agitadamente en diversas ciudades del norte de África, ocupando diversos cargos al servicio de diferentes sultanes y completando su formación intelectual.
Es especialmente  relevante, cuando se quedó en Fez, donde, además de profundizar en las ciencias tradicionales y en la filosofía, tomó contacto con materias como las Matemáticas, la Astronomía, la Astrología y otras afines.

Etapa/fase 3: desde 1375 hasta su muerte en 1406:

En 1375, cansado de sus aventuras políticas, dedica el resto de su vida a estudiar y reflexionar sobre los hechos sociales, económicos e históricos y decide retirarse a la fortaleza de Ibn Salama, en Argelia, en la que pasó cuatro años dedicado a la redacción de su gran obra histórica. Luego se fue a Egipto, donde se dedica a la enseñanza y al ejercicio de la judicatura como cadí o juez.
Finalmente, en 1406, murió Ibn Jaldún en El Cairo.
Ibn Jaldún fue desconocido durante siglos y sólo empezó a ser leído en occidente a partir del s. XIX.
Además se le considera el único pensador entre la mente africana- San Agustín y Hegel, que se ha planteado a fondo el problema de la historia. De ahí la importancia que tiene el estudio de su obra.

“al-Muqadima” Introducción a la historia universal:

El libro está dividido en seis tratados, el primero de ellos es la Muqaddima o Prolegómenos:
El título de esa obra principal:
  
كتاب العبر وديوان المبتدا و الخبر في ايام العرب و العجم و من عاصرهم من ذوي السلطان الاعظم
(Kitābu l-ʕibār wa Diwānu l-Mubtada' wa l-Ħabar fī Ayyāmu l-ʕarab wa l-Ājam wa l-Barbar wa man ʕĀsarahum min ĐawIu s-Sultānu l-Akbār
(La evidencia, registro de los inicios y eventos de los árabes, bereberes y persas y sus poderosos contemporáneos.)


La Muqadima prologa al resto de la obra, aunque posteriormente se ha tratado como una obra independiente.
Debido a ser una obra bastante extensa, la voy a explicar en dos partes:
Primero, desde una visión general de toda la obra y luego, hablaré profundamente de los capítulos II y III, explicando su concepto de cohesión y su vínculo con el término de Estado fuerte ( de un Imperio).

Ibn Jaldún añadió estudios de filosofía e historiografía que, en cierta manera, sería similar al que siglos después se establecerían por distintos autores más modernos.
Debido a su análisis de los conflictos sociales, sociólogos modernos de la teoría del conflicto como Ludwig Gumplowicz, Gustav Ratzenhofer y Franz Oppenhereimer han demostrado un creciente interés en Ibn Jaldún. Sobre todo, por la importancia del método de conocimiento racionalista empleado por Ibn Jaldún, del todo acorde con su condición de creyente, pero sin subordinar el conocimiento y la interpretación de la realidad a las descripciones contenidas en el Corán o en los hadices.

En el libro sexto del Muqaddima o los Prolegómenos, queda claro que es la reflexión basada en la experiencia, lo que permite literalmente al hombre hacerse tal, por encima de un mundo animal sujeto a los sentidos. Cabe admitir por cuestión de fe una forma de conocimiento superior, estrictamente espiritual, propio de los ángeles, pero sin incidencia alguna sobre el conocimiento humano. Es sobradamente conocida la utilización de este criterio para explicar el carácter cíclico de las civilizaciones, y centrándonos en su núcleo, la interacción conflictiva entre el modo de vida nómada y el urbano o civilizado.

Lo es menos la profundización que lleva a cabo Ibn Jaldún en el análisis de una vida nómada, adscrita al mundo árabe, sin concesión alguna y en la cual va incluida una interpretación de la génesis del Islam de cuya vigencia dan cuenta especialistas como Patricia Crone. Dotado de una fuerza propia, derivada de la cohesión grupal o asabiyya, el mundo árabe nómada es violento, depredador y en principio incapaz de formar un imperio. Todo cambia, sin embargo, cuando sobre esa rudeza de costumbres incide la religión llevada por un Profeta a sus corazones: "Entonces la unificación más cabal se lleva a efecto entre ellos poniéndolos en condiciones de efectuar las conquistas y de fundar un imperio."

En cuanto a los aportes a la economía de Ibn Jaldún, se incluye el descubrimiento de la dinámica de los mercados. Analiza también conceptos económicos fundamentales como población, precio, beneficio, lujo, y formación de capital. Además traza las interpretaciones entre ellos.

En los capítulos II y III, nuestro autor trata del surgimiento, del nacimiento y de la creación tanto de la jefatura como del poder real y sus tipos, interpretando la historia desde el punto de vista socio-político:

Según Ibn Jaldún, es importante diferenciar entre el liderazgo y el poder real. Ya que
El liderazgo: es la capacidad de convicción, y quien la posee es seguido, pero no tiene sobre los demás fuerza ejecutiva para imponer sus decisiones.

Mientras que el poder real: implica superioridad y fuerza ejecutiva.
Esa superioridad es algo que va más allá del liderazgo.
Puesto que el poder real es una posición noble y deseable que contiene todos los bienes de este mundo – los placeres corporales y las delicias espirituales- , y por ello hay gran competencia por alcanzarlo y raramente alguien lo cede voluntariamente a otro. Esto genera disputas, luchas, peleas e intentos de dominio tribal.


Llegados a este punto, se pueden plantear varias preguntas:


 ¿Cómo se alcanza ese poder real?

El poder se alcanza con la superioridad, y la superioridad sólo se alcanza con la cohesión; y cuando dicha cohesión desaparece, desaparece el poder.

  ¿Qué es la cohesión?
La assabia significa espíritu de clan, espíritu de grupo, solidaridad entre los miembros del mismo y fuerte vínculo.

Para Ibn Jaldún al assabia “la cohesión” es el motor de la historia social para muchas comunidades, sobre todo, árabes. La cohesión siempre acompaña a la vida beduina, más que a la urbana. Para que exista dicha cohesión, debe de haber una relación de parentesco por lazos de sangre. Porque la unión entre los de la misma sangre es la que se da naturalmente en la especie humana, sobre todo, cuando el parentesco siente en sí mismo la afrenta por la injusticia hecha a su pariente y el asunto de cada uno de ellos es sentido como propio por sus parientes, y la fraternidad hacia él es lo más importante. Esta solidaridad entre los miembros del mismo clan o tribu genera unión y contacto íntimo. Una vez que este grupo tenga cohesión fuerte entre sus miembros pasa a ser su defensa y protección. Dios ha puesto en los corazones de sus siervos la solicitud y el afecto hacia los parientes y los allegados como algo propio en la naturaleza humana. Esto hace que aumente el miedo que hacia ellos sienten los demás grupos. En este caso, el liderazgo no puede darse más que si existe superioridad, y la superioridad sólo puede manifestarse a través del espíritu de clan. Sin duda alguna el liderazgo sobre un pueblo lo ejerce el grupo que manifiesta un espíritu de clan superior al de todos los demás, ya que cualquiera de esos grupos, cuando nota la superioridad de ese espíritu en el líder de aquel, se muestra dispuesto a someterse a él y a seguirle y todos estos grupos se convierten en un gran grupo tribal único.

Así, pasamos de la tribu y el liderazgo, o sea al estado de una comunidad más grande, que une a todos los grupos en un pueblo único y de esta forma, posee el poder real.  Aun con todo, el comienzo de la dinastía –una vez que ha llegado a dominar amplios territorios- tiene, en sus comienzos, dificultades para someter las voluntades y dirigirlas. A menos que posea una fuerza coercitiva suficiente, ya que dicha dinastía resulta extraña y la gente no está acostumbrada a su dominio ni habituada a soportarlo.
Pero, una vez logrado el poder presentado por un líder que ejerce la autoridad (o sea, ejercer el gobierno y el poder sobre toda la comunidad en una determinada sociedad), la probidad es fundamental, ya que, a su vez, ese gobierno y ese poder deben ser garantía para la creación y representación de Dios entre las criaturas, para que sus leyes sean cumplidas.

  ¿Cómo se protege la cohesión?

Realmente la religión, a través de la ayuda de Dios, es la que une los corazones y los deseos.

Dice Alá: “لو انفقت مافي الارض جميعا مالفت بين قلوبهم
Significa: Tú, aunque hubieras gastado todo cuanto hay en la tierra, no habrías sido capaz de conciliar los corazones. O sea, cuando los deseos y los corazones se presentan en la dunia (el mundo terrenal), las rivalidades surgen y las disensiones se propongan. Sin embargo, cuando se vuelven hacia la verdad, y rechazan el mundo y su falsía, y se dirigen hacia Dios, todos coinciden; y la colaboración y la ayuda mutua aumentan. Con ello se generaliza la elevación de las aspiraciones y la dinastía se engrandece.

En resumen, la impregnación religiosa hace que desaparezcan las rivalidades y  se adquiera la conciencia de que el sentimiento es unánime y el deseo es sólo uno. Por él están dispuestos a morir. Entonces, las leyes que Dios ha impuesto
a lo que él creó y a sus siervos, sólo sirven para el bien y conducen al progreso, como atestiguan las normas religiosas. Mientras que las leyes humanas no provienen más que de la ignorancia de la verdadera religión o del demonio, y se oponen a lo presentado por Dios -alabado sea- y a su poder. 

 En resumen, un buen Estado une a estos cuatro elementos: (gobierno + poder + probidad + religión).


   ¿Cuándo desaparecen el estado y con él la cohesión?

Cuando el liderazgo queda establecido en los miembros de una familia determinada, la que ejerce el poder, y es heredado por uno tras otro de sus miembros a lo largo de numerosos descendientes y sucesivos reinados, las mentes olvidan lo que sucedió.

 Esto es, se olvidan de las dificultades a las que se enfrentaron las primeras generaciones, quienes realmente fundaron y crearon una dinastía. Así, no necesitan de demasiada cohesión para mantener su autoridad. Esto es porque, durante este tiempo, mantienen su autoridad y su dinastía, pero empiezan a entrar en la esfera de poder clientes y beneficiados, que medran a la sombra del grupo dominante y de su poder. O sea, con ayuda de familias ajenas a la suya propia, que entran a formar parte de su clientela. A su vez,  los deseos se derivan a la dunia (vida terrenal).

Un ejemplo de ello, son los omeyas de al- Ándalus: cuando la cohesión tribal desapareció entre los árabes, surgieron los reyes de taifas que tomaron el poder, dividieron el territorio, lucharon entre ellos y se repartieron el reino. Cada uno se adueñó del territorio que dominaba y se ensoberbeció. Y adoptaron nombres honoríficos de reyes y vistieron sus marcas distintivas, seguros de que nadie pretendería quitárselos ni cambiárselos. Entonces, mantenían su autoridad con la ayuda de clientes y beneficiados, de gentes llegadas a al-Ándalus desde la otra orilla y pretendientes a tribus beréberes. 

Finalmente, se debilitó la cohesión entre los árabes y los demás se hicieron el amo del estado. 


¿Qué son las Edades de las Dinastías según nuestro autor?

Es bien sabido que la vida natural de las personas, según sostienen médicos y astrólogos, es de 120 años. Y como la edad puede ser diferente dentro de cada generación; las anteriores vivían casi 100 años, mientras que las de otros son de 50, 70 u 80. Para esta comunidad nuestra (la denominada Umma musulmana), las edades oscilan entre 60 y 70 años, tal como afirma un hadiz.
Por regla general, una dinastía no supera la edad de tres generaciones; entendiendo por edad, la de un individuo cuando alcanza su punto medio, que es de 40 años. Dijo Dios: حتى اذا بلغ اشده وبلغ اربعين سنة . 
Significa: Hasta que alcanzó su madurez y cumplió cuarenta añosPor eso, afirma que la edad de un individuo se corresponde con la de una generación.

Asimismo, hemos dicho que la edad de una dinastía no sobrepasa normalmente la de tres generaciones. 

I.            La primera generación: 

Mantiene las características propias del desierto:
§  su dureza y su carácter indómito.
§  Lo que es soportar las privaciones, la valentía, la fiereza y el sentimiento de orgullo compartido.
Y todavía existe la cohesión tribal y las gentes se les someten.

II.            La segunda generación:

§  Modifica su comportamiento con el poder y el lujo: se acomoda a la vida sedentaria, pasa de las privaciones al bienestar y a la abundancia.
§   Pasa de compartir la gloria, a quererla cada uno para sí.
§  La fuerza de la cohesión tribal se quiebra en cierta medida.
§  Queda mucho de lo antiguo, porque tienen contacto con la primera generación, conocen sus principios, y son testigos del orgullo, la gloria y de su determinación para defenderse y protegerse.
§  El abandono de todo esto no se sucede de una vez.

III.            La tercera generación:

§  Se olvida totalmente del desierto y de su rudeza.
§  Pierde la dulzura del honor y de la cohesión del grupo.
§  El lujo alcanza en ellos su límite cuando se habitúan a las comodidades de la vida y se convierten en personas a cargo de la dinastía.
§  La cohesión desaparece totalmente y se olvidan de la protección, de la defensa y de sus deseos de nuevos conquistas; por tanto, buscan ayuda en otros más valientes, así aumentan el número de sus clientes, quienes dan a la dinastía un cierto grado de seguridad. Hasta que Dios permite que se extinga y desaparezca la dinastía y lo que ella mantiene.
IV.            La cuarta generación

Desaparece el prestigio. La duración de estas tres generaciones es, como ya he dicho, de 120 años.


Finalmente, Quería presentar un texto de nuestro autor en el que expresa su deseo, con respecto a su gran obra, de que otros continúen y desarrollen sus teorías.


Escribió literalmente en una página escasa:

Casi nos hemos alejado de nuestro objetivo. Por eso nos hemos decidido a poner fin al discurso en este libro primero, que versa sobre la naturaleza de la civilización  y aquello que le afecta. He agotado aquellos problemas que sobre ello se plantean de una manera que considero suficiente. Quizá venga después de mí alguien, favorecido por Dios, con un pensamiento correcto y con un conocimiento claro, que profundice en sus problemas muchos más de lo que nosotros hemos escrito. No es propio de quien pone de manifiesto una parte de la ciencia, clasificar sus partes y aquello de lo que se habla en ella. Los que vengan detrás añadirán poco a poco otros problemas hasta que ella se perfeccione. Dios sabe y vosotros no sabéis.     









                                                                                                                                                                        Autora: Ranim Solayman

Y, ¿Estos moros?





RAZA / ETNIA Y RELIGIÓN


¿Ha de diferenciar entre la raza, "la etnia" y la religión?


Para empezar, sí, hay que de diferenciar entre lo que

Por un lado tomamos como referencia a la raza árabe, y lo que por otro lado tomamos como referencia a la religión; en el caso de los que llamamos en España "moros", (no todos los árabes son musulmanes ni todos los musulmanes son árabes).

Es decir, Existen árabes laicos, ateos, cristianos, judíos, alauies, drusos, ismailies, etc. y no todos creen en el Islam. pero, también hay musulmanes chinos, alemanes, españoles, estadounidenses etc.


En cuanto a la defensa de los derechos de las mujeres:

Del mismo modo hay que diferenciar entre los derechos de las mujeres árabes y de las musulmanas. 

Dicho esto porque el Islam establece los derechos humanos tanto de las mujeres como de los hombres. 

En el caso de la mujer árabe, pues ha sufrido mucho del machismo, ¿por qué?

La cultura árabe es una cultura machista, igual que muchas otras como la india, la china, la antigua occidental, etc.

Sin embargo, con el nacimiento del Islam en la zona árabe, el profeta Mohammad ha conseguido proteger los derechos de las mujeres en ámbito cultural totalmente machista en donde enterraron a las niñas recién nacidas porque les daba vergüenza tener hija mujeres, el profeta Muhamad estableció con mucha paciencia ciertas estrategias para cambiar todas aquellas barbaridades, de hecho su esposa Aisha era la madre de los creyentes, la cual, después de la muerte del profeta abrió su casa para enseñar el Islam a todos, digo todos refiriendo a hombres y mujeres.

Quiero llegar a la conclusión que a pesar de todo el esfuerzo del profeta para eliminar machismo, mucha gente que se convirtió al Islam siguió manteniendo su antiguo pensamiento o digamos costumbres árabes ajenas al Islam.

Este es el problema que hoy en día sufrimos, como consecuencia. 

Los hombres utilizan la autoridad de la religión para satisfacer su machismo cultural. No Generalizo, no todos los hombre árabes son así, sino una cierta parte.


Un ejemplo claro: 

El Islam prohíbe al hombre tener relaciones sexuales con una mujeres sin haberse casado con ella, provocando que hacen algunos salgan y mantengan relaciones sexuales con otras mujeres, y en cuanto a las mujeres de su familia les prohíben hablar con compañeros o amigos varones.


Otro factor que nos está afectando como musulmanes es culpa de lo que difunden los medios de comunicación occidentales atacando siempre a la etnia  árabe y a la religión musulmana, relacionan y/o confunden lo cultural con lo religioso.

Otro ejemplo: 

Una persona roba o/y hace daño, siendo esta persona de un país árabe y que pueda ser o no creyente y/o practicante, lo primero que los medios de comunicación dicen es: 

“UN MUSULMÁN ha robado o ha asesinado, etc”. Omitiendo las características del hombre, tales como el país de procedencia o cuál es su Religión o ideología, creando así la mala imagen o la mala información hacia lo que es el musulmán o el Islam.


A esto puedo decir : Basta YA, basta ya , basta ya.

Queremos un Islam lejos de costumbres y culturas.

Queremos un Islam sin fronteras y abierto para todo el mundo.

Queremos un Islam no atacado por los medios de comunicación.






Ranim Solayman